La conciencia tomada por parte de la sociedad en las últimas décadas en lo que respecta al desarrollo sostenible y el cuidado del planeta, tuvo su resultado a finales del año 2015, cuando Naciones Unidas impulsó una iniciativa que diera continuidad a los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Tras un proceso de negociación que involucró a 193 Estados miembro de la ONU, se adoptaron una serie de objetivos globales con unos propósitos muy claros: proteger el planeta, erradicar la pobreza y asegurar la prosperidad internacional. Estos objetivos se aprobaron en una cumbre celebrada en Nueva York mediante una reunión plenaria de alto nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas, y fueron recogidos en la denominada Agenda de Desarrollo Sostenible –o Agenda 2030-, a través de 17 metas, u Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que deben alcanzarse antes de esa fecha.
Por tanto, tener presentes los 17 objetivos y adoptar aquellos que resulten pertinentes en función del área de servicios, se considera una buena práctica a seguir por parte de los proveedores. Además, los retos a los que se enfrenta la comunidad internacional a este respecto, y el grado en que los proveedores se esfuerzan por ayudar a superarlos, suelen ser uno de los aspectos que las delegaciones gubernamentales e institucionales valoran durante la búsqueda y rastreo de proveedores de servicios para llevar a cabo sus viajes. En este sentido, es recomendable y muy provechoso que los proveedores adopten, en la medida de sus posibilidades, acciones y estrategias dirigidas a cumplir con estos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Aunque el abanico de proveedores de servicios para clientes del sector GITT (Governmental and Institutional Travel and Tourism) es considerablemente amplio, centrándonos en aquellos más comunes, como pueden ser alojamiento o alquiler de vehículos con conductor, entre otros, podemos aconsejar las siguientes buenas prácticas orientadas al sector GITT y dirigidas al cumplimiento de los ODS:
- Salud y bienestar: Promover prácticas orientadas a mejorar las condiciones del personal que trabaja en la empresa proveedora, reduciendo las posibilidades de accidentes laborales y/o de tráfico a través de la formación, la tecnología y la concienciación.
- Educación de calidad: Ofrecer al personal de la empresa, la formación necesaria para poder desempeñar su trabajo dentro del mismo, independientemente del género, la confesión, la orientación sexual, la raza o la etnia.
- Igualdad de género: Poner fin a cualquier forma de discriminación, tanto en el acceso a los puestos de trabajo, como a las oportunidades de liderazgo y al acceso a recursos económicos más altos.
- Energía asequible y no contaminante: Utilizar energías renovables y adaptar los recursos ya existentes, o adoptar nuevos equipos, para conseguir una mayor eficiencia energética.
- Trabajo decente y crecimiento económico: Crear puestos de trabajo con condiciones decentes, fomentando el emprendimiento, la creatividad y la innovación, protegiendo los derechos laborales y promoviendo un entorno de trabajo seguro y sin riesgos.
- Reducción de las desigualdades: Potenciar y promover la inclusión social y económica de los trabajadores, independientemente de su edad, sexo, raza, etnia, origen, confesión o situación económica.
- Producción y consumo responsables: Adoptar prácticas sostenibles como, por ejemplo, la reducción de la generación de desechos mediante actividades de prevención, reducción, reciclado y reutilización.
- Paz, justicia e instituciones sólidas: Contribuir, por ejemplo, a la erradicación de la corrupción y el soborno en todas sus formas.
Como ya hemos comentado, adoptar prácticas que lleven al proveedor de servicios turísticos hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible es, además de necesario, una oportunidad de progreso, cambio, modernización y aumento de la capacidad de resiliencia, por lo que no sólo es recomendable, sino muy provechoso para los mismos, pues supone una mejora en la imagen de la compañía, en el renombre de la misma y una mejor optimización de los recursos, lo que se traduce en aumento de beneficios y reducción de los costes de la empresa.