Independientemente del ámbito en el que se desarrolle un viaje gubernamental e institucional, la figura del cliente es el ente alrededor del cual giran multitud de aspectos esenciales, entre los que se encuentran el protocolo, que rige las normas de conducta y cortesía que se han de tener en cada situación.
Entendemos por protocolo como aquellas reglas de formalidad que rigen las relaciones institucionales así como los actores y ceremonias oficiales. La etiqueta, la conducta e incluso la cultura son características que deben conocerse de antemano para desarrollar un evento o relación internacional satisfactoriamente.
Por tanto, hemos de destacar la profundidad de la solemnidad que implica el protocolo en actos, eventos o reuniones en las que participan los clientes GITT para actuar en consecuencia.